La criatura estaba en una trampa para animales. Los campesinos que lo descubrieron se aterrorizaron y lo ahogaron hasta matarlo.
En la cinta se observa a Marao López, el hombre que encontró a la criatura. En su relato, describe que gritaba y que se movía para tratar de escapar de la trampera en la que había caído. Con la ayuda de otras personas, lo sumergió en agua hasta que, luego de varias horas, el extraterrestre perdió la vida.
El año pasado, el granjero decidió enviar el cuerpo a una universidad para que le realicen pruebas científicas. Los investigadores comprobaron que se trataba de un ser de otro planeta, cuya contextura corporal era similar a la de los lagartos. Además, vieron que su dentadura no presentaba raíces y que la estructura articular del cuello se parecía a la de los humanos. El tamaño del cerebro también sorprendió a los expertos, quienes determinaron que tenía una inteligencia superior.
Según publicó la prensa mexicana, el hombre que vio al bebé extraterrestre fue encontrado muerto, al poco tiempo de entregar el cuerpo a los científicos. Estaba quemado en el interior de un auto, en un misterioso hecho que aún no se resolvió. En tanto, cuando las imágenes tomaron estado público, un especialista del país azteca las analizó y afirmó que eran auténticas. "No se trata de un montaje", concluyó. (Especial)
Fuente: lagaceta.com.ar
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